El negocio ofrece una amplia variedad de platos deliciosos, como ramen, curry udon y pollo marinado y frito. Los sabores de los platos son bien equilibrados y no es necesario beber mucha agua durante la comida, lo que indica que el caldo está bien hecho y no está lleno de glutamato. Además, las porciones son abundantes, por lo que una sola ciotola de ramen es suficiente para satisfacer a una persona. También se ofrece la opción de agregar pasta, carne o verduras extra por un pequeño costo adicional, lo que permite personalizar el plato según el apetito de cada persona. El ambiente del local es agradable y peculiar, con un expositor de gadgets y una colorida máquina tragamonedas hechos en Japón cerca de la caja.
Algunas opiniones mencionan que el negocio tiene problemas con la calidad de ciertos ingredientes, como los hongos y la carne. También se menciona que los gyoza pueden estar un poco secos y tener un regusto ácido debido a un ingrediente desconocido. Además, se ha señalado que el negocio tiene problemas de higiene, con alimentos en descomposición cerca de la zona de almacenamiento de basura y presencia de polvo. También se ha mencionado una mala experiencia con el servicio al cliente, donde se intentó cobrar un suplemento por una porción de tiramisú que no se consumió y se negaron a retirarlo.