El negocio cuenta con una excelente calidad y cantidad de comida a un precio justo, especialmente considerando su ubicación junto al Vaticano. Los clientes han elogiado el servicio, destacando la profesionalidad de los camareros. Además, el restaurante ofrece opciones sin gluten, lo cual es muy valorado por aquellos con restricciones alimentarias.
Aunque en general las opiniones son positivas, algunos clientes han mencionado que la experiencia no fue tan maravillosa como esperaban. Algunos aspectos que se pueden mejorar incluyen la atención de los anfitriones y camareros, así como la calidad de la pasta y la focaccia. Sin embargo, estos comentarios negativos son mínimos en comparación con las opiniones positivas en general.